Reír tranquilo, luciendo una dentadura perfecta, es para algunos algo normal. Para otros, esto es sólo posible a través de los implantes dentales.
REALIDADES DE LOS IMPLANTES DENTALES
Un implante dental es un cono o cilindro de titanio con rosca externa o liso, que se introduce en el hueso sustituyendo la raíz del diente perdido. Está recubierto por distintas sustancias para permitir la oseointegración (unión del implante al hueso). Los implantes dentales se colocan en el maxilar a través de una intervención con anestesia local y actualmente se utiliza ampliamente en la odontología moderna.
En pacientes que no tienen altura o ancho adecuado de maxilar, se pueden colocar implantes dentales con la ayuda de injertos en el hueso provenientes de otras zonas dadoras, de bancos óseos, materiales biológicos o sustitutos sintéticos. En resumen, si hay poco hueso, se puede “preparar” para luego colocar el implante.
Si la persona no ha cuidado sus dientes y no tiene intención de modificar sus hábitos de cepillado e higiene, el pronóstico del implante es negativo. Si perdió sus dientes por paradentosis o periodontitis, se deberá evaluar el caso. Si en cambio fue por caries o traumatismo, y el nivel de higiene es el adecuado, el pronóstico es favorable.
MITOS DE LOS IMPLANTES DENTALES
• Los implantes dentales pueden producir reacción alérgica o rechazo.
En realidad no existe la alergia al titanio. Lo que puede ocurrir es que no se logre oseointegración, es decir que el implante dental no se suelde con el hueso. Afortunadamente ocurre en muy pocos casos, del 0,3% al 3% de los casos aproximadamente. Cuando la oseointegración ocurre el implante queda fijo y muy firme, cumpliendo funciones de un diente o molar natural, para que esto suceda hay que esperar de 4 a 6 meses.
• Los implantes dentales son sólo para gente mayor que ya perdió su dentadura.
Cualquier persona que tenga su dentición desarrollada (a partir de los 18 años) puede tener un implante dental aunque “hay que merecerlo”. Cada persona que invierte tiempo y ganas en esto, debe ser consciente de que hay que mantener metódicos hábitos de higiene.
• Quienes sufran ciertas enfermedades no pueden tener implantes dentales.
Ni siquiera en casos de diabetes, periodontitis, hipertensos, osteoporosis, enfermos cardíacos hay limitaciones. Pero siempre se busca que la persona esté compensada y se pide autorización escrita al médico que atiende su caso. También se han colocado implantes dentales en pacientes que han sido irradiados por carcionomas, sin que se presentaran dificultades ni problemas luego de una metódica anamnesis y análisis de datos.